
Por otro lado, tenemos a Mac y su Leopard, el cuál ha habilitado características compatibles para la nueva gama de computadores con procesador Intel. Cabe destacar que esta versión de este sistema operativo no es compatible con muchas aplicaciones de anteriores Mac OS, lo que significó una dura crítica, ya que comercialmente obligaba a los usuarios con procesador Motorola a adquirir nuevas versiones de software para Mac. Y créanlo, no son nada baratos. La diferencia de una Mac a una PC convencional es su poder de procesamiento gráfico, no por nada las prefieren para diseño gráfico o web. Toda su lógica procesal se centra en una mayor interacción gráfico - CPU, que a diferencia de la PC, se centra en memoria - CPU. Esto se logra con un procesador matemático de doble densidad o nivel, que desahoga al CPU y liberar su caché en una forma más dinámica. Por eso es que Mac es cara.

Con todo esto, podemos imaginar que todas las grandes marcas comerciales de PC's como Dell, HP, Gateway o IBM incluso, que recomiendan en sus equipos Windows (Vista) siempre se quedarán con Microsoft como aliado para fines de inclusión en sus equipos. Pero se equivocan. Ultimamente, estos comercializadores han elegido alternativas más económicas para incluir en sus equipos. Tal es el caso del FreeDOS que es una variante del ya clásico -y descontinuado -MS-DOS en su versión libre. La principal limitante de este último era que no podía ejecutarse en modo multitarea, y eso complicaba mucho las interacciones con el procesador. La historia del FreeDOS se remonta hacia 1983 cuando surge el proyecto GNU y, posteriormente en 1991, entra en el plano Linux como sistema operativo de distribución libre. Cabe destacar que FreeDOS es un híbrido entre Unix y DOS de la Microsoft. Algo muy complejo, al parecer.

Ahora bien, hablando de Linux tenemos dos distribuciones que actualmente están lidereando el gusto entre los amantes del software libre. Por un lado, tenemos Ubuntu -el cual cabe aclarar, no forma parte de las distribuciones de Linux, más se basa en éste -que en sus distintas versiones ofrece una interacción amigable con el usuario, destacando su poca dificultad para cargar controladores de los nuevos dispositivos que van saliendo al mercado. Por otro, tenemos al ya clásico Red Hat, una distribución que ha mejorado mucho, pero que ha encontrado ciertas dificultades con respecto a la seguridad. No obstante, por su diseño y funcionalidad, no deja de ser uno de los consentidos por los usuarios.

Pero el problema no es elegir un sistema operativo para nuestra PC o servidor, sino la seguridad con la que cuenten, ya que actualmente los virus y gusanos ya no distinguen banderas y se infiltran en cualquier nivel donde encuentren vulnerabilidades. Habrá que esperar a que Windows o Mac OS nos sorprendan con versiones que se encuentren lo suficientemente protegidas, pero a este respecto, hay que considerar que así como los SO evolucionan, lo harán sus némesis para fastidio de más de un usuario y, por qué no, compañía.